Cuando llegan las fiestas de fin de año, también llega la preocupación por nuestras mascotas pues son ellos quienes padecen los efectos de la piroctenia. La costumbre de tirar cohetes para estas fechas sigue siendo una de las principales causas de extravíos y accidentes de perritos que huyen atemorizados de sus casas.
El método con vendas para protegerlos de los cohetes va junto con las medidas de prevención habituales para nuestras mascotas.
Las recomendaciones para prevenir estas malas experiencias se multiplican en esta época, ya que son muchas las familias que pecan de «exceso de confianza» («Mi perro no se asusta», «Mi perro está acostumbrado a estar en la vereda y no se va», «Nosotros dejamos la puerta abierta tranquilos porque mi perrito nunca se escapa», etc). El ruido ensordecedor de las bombas de estruendo puede provocar reacciones imprevistas en un animal víctima del pánico.